El cardenal Renato Martino, presidente del consejo pontificio justicia y paz del Estado del Vaticano, ¡ha amenazado! a Amnistía Internacional con lanzar una campaña de satanización y un boicó económico contra esta organización por defender la tesis de que el aborto es una alternativa racional en los casos en que el embarazo es fruto de una violación.
Es decir, la Iglesia Católica defiende y exige que las violadas que se quedan embarazadas hagan de tripas corazón y sean madres del hijo de sus violadores.
A estas alturas es difícil sorprenderse o escandalizarse ante una opinión, pero la Iglesia Católica parece dispuesta a batir todas las marcas.
Es decir, la Iglesia Católica defiende y exige que las violadas que se quedan embarazadas hagan de tripas corazón y sean madres del hijo de sus violadores.
A estas alturas es difícil sorprenderse o escandalizarse ante una opinión, pero la Iglesia Católica parece dispuesta a batir todas las marcas.
Hace apenas dos semanas otro alto cargo de la curia criticaba a los medios de comunicación por informar de que la sección estadounidense de la multinacional vaticana abonará decenas de millones de dólares para indemnizar a las víctimas de abusos sexuales perpetrados por sacerdotes... ¿A quién pretende confundir, engañar y embrutecer la Iglesia Católica?
La corte de Benedicto XVI tiene los rasgos propios de una secta de hipócritas amorales. El concepto de maternidad que la Iglesia Católica sacraliza para la especie humana es similar a la maternidad de los animales irracionales. Las mujeres --que son discriminadas desde siempre por la misoginia anticristiana del Vaticano-- merecen respeto, ¡sin excluir a las violadas!:
Sólo a un desequilibrado se le puede ocurrir que el fruto del delito merece mayor consideración que la violada.
Sólo a un desequilibrado se le puede ocurrir que el fruto del delito merece mayor consideración que la violada.
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Yo lo que no logro comprender es por qué existen todavía tantas mujeres católicas practicantes. Eso sí que es masoquismo, y del duro.
ResponderEliminarLa Iglesia siempre ha sido misógina. SIEMPRE. Ahora ha vuelto a demostrarlo, simplemente.
En coincidencia con Viguetana, tampoco yo lo entiendo. Es más, no entiendo como alguien que pretenda vivir en paz con los hombres y con su conciencia sea católico practicante.
ResponderEliminarHola no conocía este blog pero he entrado de casualidad busca información de mi problema , ya q yo tengo secuelas por culpa de abusos sexuales .
ResponderEliminarY ha salido este artículo . Yo soy católica practicante cuando puedo , y bueno yo ya se la mentalidad de la iglesia. Y no es de ahora q margine a las mujeres y las denigre , es de siempre .
La doctrina caltólica la acepta de verdad poquita gente. Es uan pena q estas cosas sucedan en el mundo viniendo de una institución tan importante como la iglesia.
El día q las mujeres lleguen a los altos cargos de la iglesia (es decir nunca) la iglesia comenzará a cambiar de verdad .
Un saludo
"La Iglesia siempre ha sido misógina"."Y no es de ahora q margine a las mujeres y las denigre , es de siempre."
ResponderEliminar"El día q las mujeres lleguen a los altos cargos de la iglesia (es decir nunca) la iglesia comenzará a cambiar de verdad"
Cuando no se sqabe de algo se dicen disparates vamos por partes:
El grado maximo dentro de la iglesia son los santos, y excluyendo la humanidad de Cristo esta la Virgen Maria, una MUJER que no la dieron caracter sacerdotal y asi ha continuado la tradicion y lo que se establecio por Cristo
"No es entonces que la Iglesia haya impuesto una ley, sino al contrario.
La Iglesia se declara sin autoridad para actuar por encima
de lo establecido por Cristo."
Los sacerdotes y monjas tienen el mismo valor osea siervos de Dios.
El papa no es mas que una monja, solo son funciones diferentes para servir a Dios.
1) El Magisterio apela a la Tradición, entendida no como
"costumbre antigua" sino como garantía de la voluntad de Cristo
sobre la constitución esencial de su Iglesia (y sacramentos)
2) El sacerdocio ministerial es signo sacramental de Cristo Sacerdote.
El sacerdote ministerial, especialmente en su acto central que es el
Sacrificio Eucarístico, es signo de Cristo Sacerdote y Víctima. Ahora bien,
la mujer no es signo adecuado de Cristo Sacerdote y Víctima, por eso
no puede ser sacerdote ministerial.