05 febrero 2008

Ejemplos de terrorismo en la guerra contra el terrorismo

Los sospechosos se fabrican así:
«Tarek Dergoul nació y creció en Mile End (Londres). Sus padres son marroquíes. Vendía dobles cristales, limpiaba oficinas, conducían un minitaxi y trabajaba para personas de la tercera edad. Muchos de los amigos de Tarek eran paquistaníes y en el verano de 2001 decidió visitar el país para disfrutar de unas vacaciones.
«Después del 11 de septiembre, Tarek pensó que podía comprar tierra barata con sus amigos en la parte pacífica de Afganistán, pero lo sorprendió el bombardeo de Jalalabad. Sus amigos murieron y él pasó la semana siguiente herido entre los escombros. Fue hallado por la Alianza del Norte y lo llevaron a un hospital donde le amputaron el brazo. Luego lo vendieron por 5.000 dólares a los estadounidenses y lo llevaron en avión a Bagram y luego, en febrero de 2002, a Kandahar.
«A comienzos de mayo de 2002, Tarek fue vestido con un buzo naranja, le colocaron una bolsa negra sobre la cabeza y le pusieron esposas de tres piezas: Pensé que iba a casa. El viaje fue largo, unas quince horas, sentado todo el tiempo, sin nada que comer --ha relatado.
«Tarek permaneció recluido durante dos años en Guantánamo antes de ser liberado sin acusación, en marzo de 2003». Solo es un de los 700 sospechosos de terrorismo que fueron recluidos en la prisión estadounidense de la bahía de Guantánamo.
Pulse y lea El viaje de la muerte (en formato PDF), informe que ha sido traducido al castellano por Germán Leyens y difundido por Rebelión.

3 comentarios:

  1. Espeluznante que esto suceda.
    Pero más espeluznante todavía que nadie pague por ello.

    ResponderEliminar
  2. algún día se harán pelis de guantánamo como de vietnam, pero mientras allí sabe dios qué hacen. y el mundo calladito.

    ResponderEliminar
  3. Las prácticas del terrorismo de estado siempre han servido a los fines del terrorismo, de hecho, ambas acciones se alimentan una a otra en una espiral imparable de funestas consecuencias.

    El gobierno de los EE.UU. ha equivocado profundamente su rumbo al adoptar estas técnicas, sin embargo, no es la primera vez que las utiliza. El FBI infiltraba las organizaciones anti-stablishment en la década del 70 con el fin de empujarlas a cometer actos de violencia que dieran lugar a la intervención estatal, apagando el foco de protesta. En Vietnam uno y otro bando aplicaron crueles torturas a sus prisioneros. Instructores del ejército estadounidense dieron a militares argentinos, chilenos, etc., las enseñanzas básicas que condujeron a la creación del Plan Cóndor y a la aplicación sistemática de la tortura en los centros de detención clandestinos que existieron en los países latinoamericanos durante la década del 70, entre otras muchas cosas más.

    Es decir que de manera consciente los EE.UU. han promovido y sostenido el terrorismo de estado en muchas naciones bajo la bandera de evitar el crecimiento del comunismo. Los resultados de esta política no pudieron ser más nefastos, la cantidad de muertos y desaparecidos en los países latinoamericanos así lo demuestra. Pero lejos de aprender la lección, el gobierno estadounidense vuelve, obstinadamente, a cer en los mismos vicios del podercon el bjetivo fraudulento de acabar con el terrorismo cuando en realidad lo que persigue es tener una razón a mano para amenazar libremente a quie le plazca con "invasiones preventivas". Para ellos, que algunos inocentes sean ilegalmente privados de su libertad y torturados es simplemente un "daño clateral" aceptable.
    Guantánamo es el medio simple de mantener estos hechos lejos de la opinión pública de su país, solo los más informados saben lo que allí sucede mientras que la gran mayoría lo ignora. Creo que en algún momento han pensado que ser el país militarmente más poderoso del mundo no sirve de nada si no utilizan esa fuerza para sus propósitos, y están actuando coherentemente con este pensamiento.
    El resto de la humanidad, pues, aquí andamos, embistiendo molinos.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar

NOTA: ImP no publica injurias ni imputaciones de faltas o delitos sin aportar pruebas ni referencias judiciales o sentencia.
Sólo serán publicados los anónimos que a criterio del administrador sean de interés.