18 March 2012

Desinterés mediático ante la decisión de la ISDA de declarar en quiebra al Estado griego

Resulta extraño y significativo que la mayoría de los medios de información convencionales hayan tratado como un asunto menor --o incluso obviado-- la decisión adoptada esta semana por la International Swaps and Derivatives Association (ISDA, Asociación Internacional de Swaps y Derivados), que ha calificado la quita de deuda griega como un «evento de crédito»… ¿Cómo?, ¿qué?
Traducido a lenguaje inteligible e inteligente: la ISDA considera que el Estado griego ha quebrado.
La ISDA es una entidad privada, como casi todas las que rigen las finanzas internacionales, y sus decisiones influyen, condicionan, cercenan e incluso anulan o burlan el poder de los gobiernos.
La decisión de la ISDA es la enésima demostración de que el lobi de las grandes finanzas impone políticas económicas, tal como demuestra el hecho de que inmediatamente después de hacerse público el dictamen de la ISDA se empezó a barajar la posibilidad de un tercer rescate griego; o sea, más préstamos (incluido más dinero público) para que la Hacienda helena pague sus deudas con la banca y siga ganando más y más...
..
Otro empujón a favor de la mal llamada
"libre economía"... ¿libre de qué? 
Lógicamente, los inversores --máxime los grandes fondos-- han paralizado sus movimientos o los han pospuesto a la espera de ver cómo reacciona el Eurogrupo, institución que ha vuelto a confirmar lo que de un tiempo acá es habitual: elude los envites o llega tarde a ellos, muy probablemente de forma premeditada, de modo que luego no hay posibilidad de hacer nada eficaz para salir del callejón.
Así, llegando tarde, el Eurogrupo impone y se auto-impone la solución que permite no cuestionar la desregulación, que siempre consiste en echar mano del dinero público y auspiciar más préstamos para seguir tapando los agujeros generados por la codicia [la desregulación o ausencia de normas y leyes de ámbito internacional es más conocida por el eufemismo referido a sus beneficiarios: el "libre mercado", o la "libre economía"].
La declaración de la ISDA tiene su lado positivo, aunque sólo para los inversores y los especuladores, pues pone en marcha los contratos over the counter (OTC) que prevén la liquidación de cierto tipo de instrumentos financieros, entre los que destacan las llamadas permutas por incumplimiento de crédito [las famosas CDS: credit default swaps], las coberturas de riesgo (pólizas de seguro) que suscriben quienes compran o dicen haber comprado deuda pública --en este caso la griega--, lo que garantiza recuperar el dinero.
Más claro: Una vez declarado el evento de crédito por parte de la ISDA se empiezan a ejecutar las CDS, de modo que quienes habían adquirido deuda griega y la habían asegurado recuperan el capital.
¿Beneficiarios? Los grandes fondos de inversión y la gran banca, que a su vez son quienes están detrás de entidades como la ISDA y quienes suscriben prácticamente todas las CDS: yo me lo guiso, yo me lo como.
Mientras tanto, Grecia --mejor dicho, los griegos-- debe seguir amortizando los préstamos de los rescates; porque los mal llamados rescates concedidos al Estado heleno no son a fondo perdido como algunos descarados dicen o dan a entender para engañar o confundir un poco más los ciudadanos, sino que se trata de créditos con intereses (beneficios) que van del 3, 4 al 5 %.
En resumen, la ISDA ha declarado la quiebra del Estado griego y los compradores de deuda helena que habían suscrito pólizas (las CDS) recuperan el capital e incluso pueden obtener beneficio.
Todo un acontecimiento financiero, pero la mayoría de los "grandes" medios de información, en Babia.
Mientras escribo esto en las tierras de Europa todavía luce el sol, pero el saludo más adecuado es ¡buena noche!
..
CON POSTERIORIDAD y relacionado:
«Los costes del nazismo alemán para Grecia (y para España)», por Vicenç Navarro.

No comments:

Post a Comment

NOTA: ImP no publica injurias ni imputaciones de faltas o delitos sin aportar pruebas ni referencias judiciales o sentencia.
Sólo serán publicados los anónimos que a criterio del administrador sean de interés.