«El control político ahora es económico. Ya no hay un censor. La censura es más sutil, según la ley del mercado y de las audiencias». Son palabras de la periodista Rosa María Calaf Solé (Barcelona, 1945), que ha recibido en Ferrol el Premio de Periodismo José Couso a la Libertad de Expresión.
Calaf ha criticado la banalización de la información que ofrecen demasiados medios y ha citado, a modo de ejemplo, que durante la reciente estancia del presidente francés Nicolas Sarkozy en España hayan dedicado más tiempo y espacio a contar las andanzas de Carla Bruni que a las actividades de su esposo. La recién prejubilada corresponsal de TVE ha alertado de que la crisis actual podría ser utilizada «como pretexto para eliminar voces molestas en los medios de comunicación (…) más preocupados por la cuenta de resultados que por la excelencia de la información».
Calaf ha criticado la banalización de la información que ofrecen demasiados medios y ha citado, a modo de ejemplo, que durante la reciente estancia del presidente francés Nicolas Sarkozy en España hayan dedicado más tiempo y espacio a contar las andanzas de Carla Bruni que a las actividades de su esposo. La recién prejubilada corresponsal de TVE ha alertado de que la crisis actual podría ser utilizada «como pretexto para eliminar voces molestas en los medios de comunicación (…) más preocupados por la cuenta de resultados que por la excelencia de la información».
Coincido con Rosa María, pero pienso que ese control económico siempre ha sido el esencial, el más importante de los métodos para conducir a todos los grupos sociales (naciones, partidos, etc.) La política es el instrumento.
ResponderEliminarSaludos cordiales
Gracias, Félix, por dejarnos esta "perla" de Rosa María Calaf, a la que hago referencia en mi blog.Coincido con Alfredo: "La política es el instrumento"
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