El año 2006 baja el telón y en el mundo de la economía poco cambiarán las cosas en 2007.
Anteayer (viernes 29 de diciembre), tras el último Consejo de Ministros del año, compareció el presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, para dejar las cosas claras --según él-- en esa materia: la macroeconomía manda; es decir: los gobiernos aceptan el papel de comparsas, la economía cotidiana seguirá supeditada a las necesidades del sistema y, lo más importante, los agentes económicos --¡vivan los eufemismos!-- conseguirán que el producto interior bruto (PIB) siga creciendo... ¡Aunque sea un crecimiento exclusivamente contable!