Langosteira nunca podrá acoger operaciones de carga-descarga
de contenedores debido a las fuertes y rápidas oscilaciones
de la lámina de agua: los buques se balancean (babor-estribor)
y lo que es peor, también cabecean (proa-popa)
A estas alturas, salvo los ignorantes o quienes han optado o se conforman con ser subditos felices, nadie ignora que en el Estado español, incluidas sus entrañas administrativas, se sigue considerando que la información es tan peligrosa y potencialmente subversiva como antes del 6 de diciembre de 1978.