Un sondeo confirma que en Galicia la corrupción se paga muy barata en las urnas

La encuesta de Sondaxe confirma la irrupción de Podemos, 

el estancamiento del BNG y el desplome del PSdeG

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Ayer domingo, 30 de noviembre, el diario coruñés La voz de Galicia publicó los resultados de la encuesta realizada por Sondaxe (empresa del Grupo Voz) sobre las expectativas de voto con vistas a las elecciones municipales que se celebrarán la próxima primavera [ver cuadro al pie del texto].
De entrada, es obligado subrayar que Podemos irrumpe con fuerza sorprendente. La sorpresa es doble por tratarse de una sociedad como la gallega, donde no sólo reina el conservadurismo político, sino que además las novedades acostumbran a ser sometidas a un prolongado período de "observación".
El sondeo confirma tres detalles de relevancia que, sin embargo, no suponen sorpresa alguna, pues desde hace ya meses son previsiones que comparten la mayoría de analistas, tanto los "de orden" como los heterodoxos:

1º Según confirma el trabajo de Sondaxe, los comicios de primavera sólo proporcionarían mayoría absoluta consistorial en uno de los siete municipios donde se ha realizado la encuesta: Pontevedra, donde el BNG de Fernández Lores vería confirmado e incluso reforzado el apoyo ciudadano;

2º El partido que en términos relativos perdería más votos es el PSdeG, que si se confirma la previsión, no sólo pagaría el deterioro de la credibilidad del PSOE en el conjunto de España, sino que en Galicia y otros territorios también habría perdido respaldo por un motivo añadido: la renovación de la que tanto hablan los dirigentes del PSdeG es puramente verbal, prueba de esto es que en casi todas las primarias de los socialdemócratas se imponen los candidatos del aparato y, por ende, los mensajes que lanzan eluden ser claros en los asuntos de ámbito municipal más espinosos o conflictivos [por ejemplo, el urbanismo, el futuro del pequeño comercio, las grandes obras carentes de rentabilidad o utilidad social y el transporte público, entre otros].
La única de las siete ciudades donde el PSdeG avanza es Vigo, mientras que en Lugo mantiene el tipo, de momento, y en el resto se derrumba; 

3º A la hora de decidir el voto, algo más del 50 % del electorado prescinde de la corrupción, motivo por el que el partido con más cargos públicos imputados, acusados o condenados, el PP, seguirá siendo la opción más votada. El crédito social y electoral de la derecha española sólo acusa grave deterioro en Vigo. 

No obstante, el sondeo --al igual que ya han apuntado casi todos los analistas-- constata que a pesar de que los derechistas perderían miles de votos todavía tendrían posibilidades de conservar las alcaldías de A Coruña y Santiago, así como acceder a la de Ourense si alcanzaran un acuerdo postelectoral con Democracia Ourensana, formación centrista de ámbito local que goza de creciente crédito ciudadano. Además, en Ourense el PSdeG se hunde cual plomo en el agua, el BNG no levanta cabeza, EU es testimonial y Podemos no acaba de cuajar.

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Casi todos los líderes

prefieren ser 
cabeza de ratón

que cola de león 

El sondeo es útil pero su fiabilidad, relativa, pues a pesar de que apenas falta medio año para que se inicie la pugna electoral hay condicionantes muy poderosos que cuestionan la solidez de las respuestas recogidas por Sondaxe. Veamos:

a) Es difícil que Podemos se presente como tal a los comicios [todo apunta que los círculos de Podemos artillarán acuerdos con las llamadas Mareas u otros colectivos], de modo que todavía es imposible prever qué ocurrirá con los votos que los encuestados han otorgado a Podemos, presente lista en solitario o en coalición;

b) La prudencia de los dirigentes políticos es grande, sus decisiones lentas y, por ejemplo, hoy nada garantiza que Esquerda Unida y Anova vuelven a presentarse coligadas bajo las siglas AGE [Alternativa Galega de Esquerdas];

c) Movimientos civiles de orden socio-político como las Mareas y Ganemos son bien conocidos en determinados ámbitos sociales [me refiero exclusivamente a las siete ciudades], pero carecen de penetración social probada. A estas alturas es imposible detectar mediante una encuesta el impacto de esas alternativas, pese a que poseen cuadros de probada inteligencia, capacidad y crédito.
Eso, unido al creciente rechazo que genera el bipartidismo (PP y PSOE), podría dar numerosos votos a las nuevas opciones que toquen tierra;

d) Existen posibilidades reales --aunque es precipitado cuantificarlas-- de que las Mareas, Podemos e incluso EU y Anova conformen nuevas coaliciones con vistas a las elecciones locales, lo que abunda en el valor relativo de la encuesta, pues refleja un escenario extremadamente coyuntural; y

e) La encuesta tampoco permite conocer, ni siquiera aproximadamente, la proyección real de Compromiso por Galicia (CxG), formación centrista de corte nacionalista que experimenta un silencioso proceso de consolidación (los medios apenas le dan cancha) y que, según todos los indicios, podría recibir votos de dos fugas de considerable volumen: votantes conservadores pero no derechistas que acostumbran a respaldar al PP --cuya gestión gubernamental ha causado grave estropicio en las pymes y entre los autónomos--, y numerosos nacionalistas que habitualmente votan al BNG pero que denuestan el giro a la izquierda que lidera el nuevo número uno del frente, Xavier Vence, quien en cierto modo no tiene otra alternativa debido a que el Bloque ha perdido votos del electorado de izquierdas en favor de AGE y ahora también padece fugas hacia las Mareas y Podemos.

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DE INTERÉS:

Para conocer las Mareas es de interés visitar la página de Marea Atlántica (A Coruña).