Hoy, mañana y pasado se celebran en Dajla (Sahara Occidental) las jornadas Cooperación Sur-Sur, organizadas por Crans Montana Forum, en las que participa el ex presidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero. La presencia de tan alto representante de la socialdemocracia hispana es significativa por dos motivos:
Ante todo, porque Crans Montana es un lobi radicalmente sistémico con base en Suiza y dedicado —entre otros menesteres— a fabricar, reforzar y promocionar la aplicación de criterios socio-económicos de corte neoliberal.
Ante todo, porque Crans Montana es un lobi radicalmente sistémico con base en Suiza y dedicado —entre otros menesteres— a fabricar, reforzar y promocionar la aplicación de criterios socio-económicos de corte neoliberal.
Y en segundo término, la presencia del socialdemócrata en la cita de Dajla [durante la época colonial: Villa Cisneros] es un paso más hacia el reconocimiento internacional del Sahara Occidental como territorio soberano del Estado invasor, Marruecos.
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De Felipe González a Rodríguez Zapatero
pasando por Jerónimo Saavedra
La participación de Rodríguez Zapatero nada nuevo supone, pues se trata de la enésima ratificación de que el PSOE acepta sin reparos la ocupación de la ex colonia y ex provincia española, tal como ya manifestó el presidente de la sección canaria de ese partido, Jerónimo Saavedra el 9 de septiembre de 2006, cuando se reunió con el entonces secretario general de los socialdemócratas marroquíes, Mohamed el Yazghi, para entre otras cosas hacerle llegar el mensaje de que sus hermanos de la Península apoyarían la marroquinización, pero si se dieran inconvenientes de agenda (por ejemplo, electorales) u otros motivos políticos de índole doméstica, el PSOE no estaría en primera línea para defender las tesis de Rabat pero evitaría todo tipo de acciones o iniciativas que contrariaran el plan alauí [en los años noventa los gobiernos que presidió Felipe González ya aplicaron criterios pro marroquíes en varias ocasiones, pero las palabras de Saavedra en 2006 constituyeron la primera declaración oficial realizada por un alto dirigente del PSOE].
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La cita tiene peso geopolítico y avala la ocupación marroquí
La convocatoria de Dajla es mucho más que un montaje de Mohamed VI para lanzar otro de sus órdagos. El encuentro tiene elevado peso geopolítico porque en las conferencias, debates y grupos de trabajo participarán o asistirán representantes de decenas de países y un ciento de relevantes dirigentes políticos y especialistas, incluidos ministros y altos cargos de varios gobiernos.
La cita, no obstante, está trufada de sinsentidos y contradicciones, pues la Unión Africana (UA) había lanzado un llamamiento invitando a los países miembros a boicotear el evento, al tiempo que emplazaba a Crans Montana Forum a que suspendiera la cita o cuando menos no admitiera la propuesta de Mohamed VI de celebrarla en el Sahara Occidental.
¿Motivos? La UA no se fue por las ramas y alegó que convocar las jornadas en el Sahara Occidental «constituye una grave violación de la ley internacional» porque supone avalar la ocupación ilegal del territorio por la fuerza de las armas, contraviniendo todas las disposiciones de la ONU referidas al conflicto.
Prueba de que los lobis económico-financieros de ámbito transnacional —como es el caso de Crans Montana— prescinden de leyes y de lo que digan las instituciones internacionales es que las jornadas de Dajla se celebran en contra del criterio de Naciones Unidas, que respaldó oficialmente el llamamiento de la UA y ha rehusado que en el programa de Cooperación Sur-Sur fueran incluidos representantes o ponentes vinculados a la ONU.
Pese a todas esas circunstancias y otras de menor calado, Rodríguez Zapatero ha acudido a Dajla y lo ha hecho con el consentimiento de la dirección del PSOE, aplicando una vez más lo que transmitió Saavedra a Yazghi: si la situación española aconseja insinuar desamor o distanciamiento [¡hay elecciones a la vuelta de la esquina!], los socialdemócratas evitarán dar besos a Mohamed VI pero tampoco harán nada que perjudique la marroquinización: impedir que participara Rodríguez Zapatero supondría romper ese pacto no escrito, pero tampoco hay necesidad de hacer ruido... y numerosos medios escriben con letra pequeña o bajan la voz para evitar el rebumbio.
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CON ANTERIORIDAD:
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| Entre los patrocinadores y colaboradores de la convocatoria marroquí hay dos singularmente significativos |
Así se escribe la verdadera historia......Solo alcanzamos a ver una mínima parte de lo que realmente sucede en el gran teatro del mundo.
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