08 mayo 2021

Hilo del mismo ovillo | Pablo Escobar idolatraba a Uribe y este apadrinó al presidente Iván Duque

La actualidad colombiana exige ventilar dos datos que ayudan entender las decisiones del enésimo (des)Gobierno que está al servicio de la codiciosa élite de los terratenientes:
1.º, el actual presidente, Iván Duque, fue apadrinado por [y es un mandado de] Álvaro Uribe, y 2,º, es obligado subrayar los orígenes políticos y éticos del padrino de Duque: Pablo Escobar idolatraba a Álvaro Uribe.
Es lógico que Escobar besara la tierra que pisaba el antioqueño pues sin la complicidad de quien era el director de Aeronáutica Civil, el narcoterrorista jamás hubiera prosperado tanto ni tan rápido.
De esa amical y rentable relación entre ambos dejó valioso por detallado testimonio la muy aplaudida y venerada por su belleza Virginia Vallejo, la presentadora de la televisión colombiana, modelo y actriz que en julio de 2006 abandonó su país a bordo de un  avión de la DEA --lo que muy probablemente le salvo la vida-- para declarar en la vista oral del juicio celebrado en EE UU contra los Rodríguez Orejuela, que fueron, primero, patrones y maestros de Escobar y luego, rivales en la exportación de cocaína a Norteamérica y Europa para finalmente, poco antcs de que cayeran en manos de la policíá antidroga internacional de EE UU, acabar siendo encarnizados enemigos de Escobar y, según fuentes estadounidenses, también sus víctimas, pues los graves errores en los que incurrieron los encargados de velar por la seguridad de los hermanos Rodríguez Orejuela solo se podían explicar si fueron intencionados, acaso actuado en comandita con la DEA o a sueldo de Pablo Escobar. 
La mayoría de periodistas que trabajaron y vivieron de cerca los hechos se inclinan por lo segundo, pues dinero aparte, varios colaboradores involuntarios del capo de Medellín habían recibido en casa, o ingresado en su cuenta corriente, una elevada cantidad de dinero de procedencia desconocida... Al día siguiente, una persona le rogaba que hiciera lo que en cada caso fuera menester para el señor Escobar, puntualizando que si satisfacía la petición recibiría un segundo pago de igual cuantía, pero si libremente decidía hacer caso omiso, don Pablo también premiaría ese acto de valor renunciando a recuperar el primer pago, que serviría para que sus huérfanos y/o su viuda salgan adelante...

Espejos reveladores 

Virginia Vallejo fue una diva cortejada por hombres del poder o con fortuna, pero en 1982 cayó profundamente enamorada de otra persona singular: Pablo, el jefe del cártel de Medellín. Ella estuvo enamorada, cierto, pero él solamente se había encaprichado. Durante más de cinco años ella fue su amante, reseño en 2008 el periodista Luis Hernández Navarro para La jornada 
Según desmenuzan los magníficos pero significativamente olvidados textos de Hernández Navarro, Virginia Vallejo declaró que Pablo Escobar idolatraba a Álvaro Uribe... ¡Lógico!, pues cuando el después presidente [Álvaro Uribe] era director de Aeronáutica Civil, concedió decenas de licencias para pistas de aterrizaje y centenares de permisos para aviones y helicópteros sobre los que se construyó la infraestructura del narcotráfico.  
Pablo solía decir, según explicó el periodista en entrevista posterior en El País, que si no fuera por ese muchacho bendito, tendríamos que estar nadando hasta Miami para llevar la droga a los gringos
En otra entrevista, Hernández Navarro comentó a la agencia EFE que Carlos Holguín, a la sazón ministro de Justicia, era la cuota en el gobierno colombiano de los narcotraficantes del cártel de Cali y que el asesor presidencial, José Obdulio Gaviria era primo hermano de Pablo Escobar Gaviria.

Uribe por doquier

Los testimonios de la diva sobre el mandatario colombiano coinciden con buen número de investigaciones. 
Unos años antes, en 1987, el periodista Fabio Castillo publicó el libro Los jinetes de la cocaína, donde documenta cómo siendo Uribe alcalde de Medellín, en 1982, el narco protagonizó la inauguracíón de la primera entrega del plan de viviendas de bajo coste que financiaba Pablo Escobar».
En marzo de 2002, el periodista Al Giordano escribió en Narco News un reportaje titulado La subida de Uribe desde Medellín: el precursor del narcoestado en el que, entre otras primicias, difundió un documento firmado por el jefe de la DEA, Donnie R. Marshall, que con fecha 3 de agosto de 2001 notificaba la captura de varios aviones con cargamentos de insumos para la producción de coca», las aeronaves que se dirigían a Medellín estaban a nombre de una empresa llamada GMP Productos Químicos
Las 50 toneladas intervenidas del precursor químico eran suficientes para fabricar 500 toneladas de hidroclorato de cocaína, con un valor en la calle de 15.000 millones de dólares. El dueño de la empresa era Pedro Juan Moreno Villa, jefe de la campaña presidencial, ex secretario de gobierno y por mucho tiempo mano derecha de Álvaro Uribe Vélez.
En 2004, la revista Newsweek dio a conocer un informe de inteligencia del Departamento de Defensa de Estados Unidos que ubica a Álvaro Uribe Vélez es el 82ª identidad incluida en una lista de 104 personas vinculadas con el negocio de la cocaína en Colombia.
Según ese documento, "el hoy mandatario ha trabajado para el cártel de Medellín y es amigo cercano de Pablo Escobar".
Los periodistas Joseph Contreras y Fernando Garavito publicaron en 2002 la Biografía no autorizada de Álvaro Uribe Vélez, el señor de las sombras, detallada investigación de «la trama secreta que muestra los poderes reales que hay detrás del poder institucional del presidente colombiano.
La investigación narra con lujo de pormenores «las relaciones de Uribe con el narcotráfico». La aparición del libro obligó a Fernando Garavito a salir exiliado de su país. 
¿Por qué, a pesar de las múltiples evidencias que ligan al mandatario colombiano con el tráfico de cocaína, Estados Unidos no hace nada específico contra él? Porque es el principal y más fiel aliado de la administración de George W. Bush en la región, conluyeron Contreras, Garavito... ¡y miles de colombianos!

Tres preguntas que urge contestar

A fecha de hoy [y cabe temer que durante años], las preguntas que urge contestar son tres:
1.ª A pesar de las múltiples evidencias que ligan a Uribe con el narcotráfico, los paramilitraes y las matanzas de más de 3.000 ciudadanos, ¿por qué la Justicia colombiana todavía no le ha encarcelado?; para colmo, hay servidores públicos que siguen jugando con el ex jefe del narcoestado al "corre, amigo, corre que sin querer casi te pillo..."
2.ª A  pesar de las múltiples evidencias de que Uribe Vélez colaboró con narcotraficantes y de que autorizó, ordenó o consintió miles de asesinatos, ¿por qué le defienden e incluso lo promocionan gentes de fortuna, dirigentes políticos y cargos institucionales estadounidenses y europeos, en especial españoles?
3.ª ¿Cuántos empresarios, políticos profesionales, jueces u otras autoridades y personajes colombianos y no colombianos deben favores o han recibido regalos del narcopresidente?

CON ANTERIORIDAD, en ImP:

5 comentarios:

  1. Por qué? Porque las redes de diverso tipo, clientelar, de favores mutuos, etc, se extienden a lo largo del mundo entre los poderosos, en general importando poco el encasillamiento aplicable según una u otra clasificación que se les pueda aplicar

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    1. Totalmente de acuerdo... son concomitantes vía dineros e intereses.

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    2. Correcto

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  2. Pufff pues no tenía ni idea de este tipo de noticias, la verdad sabía la historia de Virginia pero lo que está claro es que cuando hay intereses económicos pues normal que haya este tipo de cosas. Gracias por poner algo de luz con este artículo.

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