Sí, está mal visto decirlo, pero conviene recordarlo: La honestidad de los ciudadanos que militan en partidos políticos es, por lo general, superior a la media.
No, amable lector o lectora, no se rasgue las vestiduras, o antes de hacerlo cuente hasta 10, reflexione y trate de ser objetivo.
Nunca somos objetivos. La Verdad Absoluta no existe, pero basta con intentarlo.
Hay un hecho incontrovertible:
Quienes se afilian a un partido, a una oenegé, a una asociación de vecinos, a un centro cultural o a una entidad similar tienen, de entrada, un mérito: sentido de colectividad. Además, aun siendo cierto que hay políticos que buscan medrar, la inmensa mayoría de los militantes defienden lo que piensan y tratan de llevarlo a la práctica. Y lo hacen a cambio de nada, por el placer que produce sentirse copartícipe de algo, acaso de un futuro, y miembro de un colectivo humano.
Una de las esencias del hombre es su condición de ser social: Sin sociedad, el hombre no sería el que es, ni lo que es...
Pérez Touriño (izquierda)
y Núñez Feijoo, máximos
responsables del PSdeG-PSOE
y del PPdeG, respectivamente.
(montaje fotográfico
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Una de las esencias del hombre es su condición de ser social: Sin sociedad, el hombre no sería el que es, ni lo que es...
Dicho esto, choca sobremanera el papanatismo de los dirigentes de partido que ante escándalos como el que ahora ha estallado en el municpio gallego de Gondomar (comarca de Vigo) [detalles, en La voz de Galicia] ponen el ventilador y, con ello, también se autodesprestigian.
El caso Gondomar es ilustrativo de ese papanatismo porque los autores del presunto delito --al menos uno de ellos ya ha confesado-- son tránsfugas que ultimaban la puesta en marcha de una alternativa electoral independiente para concurrir a los próximos comicios municipales.
Y sin embargo, PSOE y PP se enzarzan en una lid absurda en lugar de incidir en uno de los aspectos que más enlodan la vida política: los personalismos y los egoísmos.
Y sin embargo, PSOE y PP se enzarzan en una lid absurda en lugar de incidir en uno de los aspectos que más enlodan la vida política: los personalismos y los egoísmos.
Los dirigentes socialistas y populares de Gondomar, cual colegiales enfadados, se tiran de los pelos. Esta actitud, aparte de demostrar un bajo grado de inteligencia política, es un insulto a los militantes de ambos partidos y, para colmo, hace el caldo gordo a esa fanfarria de profetas del nihilismo que se decican a fomentar, entre otras cosas, el descrédito de todo --no sólo de las instituciones-- para levantar la bandera del ande yo caliente y ríase la gente.
Las direcciones gallegas de PSOE y PP deberían --en mi humilde por personal opinión-- organizar cursillos para que ciertos dirigentes locales aprendan a pensar sin las vísceras en la boca.
PUNTUALIZACIÓN IMPRESCINDIBLE:
En el PP local hay quien acusa al PSOE de conocer las actividades delictivas de sus tránsfugas y de no haberlas combatido; en tanto que en el PSOE local hay quien acusa al PP de haber promocionado la escisión del grupo socialista municipal en favor de una candidatura independiente con la que pactar tras las elecciones.
Unos y otros parten de una premisa profundamente destructiva: el contrincante político siempre es abominable y hay que machacarlo a toda costa. A la ignorancia política se suma la intolerancia.
En el PP local hay quien acusa al PSOE de conocer las actividades delictivas de sus tránsfugas y de no haberlas combatido; en tanto que en el PSOE local hay quien acusa al PP de haber promocionado la escisión del grupo socialista municipal en favor de una candidatura independiente con la que pactar tras las elecciones.
Unos y otros parten de una premisa profundamente destructiva: el contrincante político siempre es abominable y hay que machacarlo a toda costa. A la ignorancia política se suma la intolerancia.
ESto de Gondomar parece de una película de Landa. Hoy cuenta La Voz que hasta los independientes estaban metidos en el ajo, les habían prometido financiarles la campaña si aprobaban el Plan General. A mí todo esto me da vergüenza. El Faro, amenazando a los altos cargos porque La Voz tenía el tema en exclusiva, los periodistas, peleando por migajas, los políticos, hablando de moral cuando todos la perdieron hace tiempo... y la gente, en la calle, haciendo chiste. C'est la vie.
ResponderEliminarEn mi opinión, lo más grave es que los partidos están dejándose arastrar por esos "independientes" que dependen del dinero que consiguen... (almargend e que haya político independientes o ajenos a parrtidos que son respetables), y al entrar en esas guerras los partidos se hacan daño a sí mismos. No lo entiendo. O lo entiendo y me da pena...
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