Si un bloguero --quien esto escribe, por ejemplo-- acusara a un ministro de delinquir, con toda probabilidad intervendría la Fiscalía. Si un paciente que espera turno durante un año para que le sometan a una operación de varices fuera a la sede del ministerio o de la consejería de Sanidad correspondiente e insultara al responsable político del servicio, también sería denunciado.
Pero en el Reino de España hay ciudadanos de primera y de segunda, y todo indica que también de tercera, de cuarta y de quinta categoría...
Pero en el Reino de España hay ciudadanos de primera y de segunda, y todo indica que también de tercera, de cuarta y de quinta categoría...
Y Pío Moa, el ex grapo que ahora ejerce de historiador y "agitador de conciencias", debe ser un ciudadano de categoría especial y, al parecer, goza de inmunidad.
¿Por qué?
Pues porque en un escrito publicado en LIBERTAD DIGITAL afirma que «una educación sexual en manos de delincuentes como los políticos actuales no me parece, francamente, que pueda producir otra cosa que delincuentes semejantes».
¿Esa frase está amparada por la libertad de expresión?
Contestada esa pregunta en el sentido que usted muy probablemente considera, cabe preguntar: ¿España es un Estado de Derecho, o un Estado que aplica las leyes discrecionalmente?
Si Moa hubiera firmado esa acusación en el desaparecido Egunkaria, la Ficalía abriría expediente
Es evidente que hay ciudadanos de primera, de segunda, de tercera... Y también es evidente que el Reino de España es un Estado de Derecho sui géneris.
Si Moa hubiera firmado esa acusación en el desaparecido Egunkaria, la Ficalía abriría expediente
Es evidente que hay ciudadanos de primera, de segunda, de tercera... Y también es evidente que el Reino de España es un Estado de Derecho sui géneris.
Firmo tu post desde el inicio hasta el final. La libertad de expresión en esta España zapateril está garantizada sólo para la derecha extrema. ¡Y eso que están perseguidos, qué si no lo estuvieran!
ResponderEliminarMe caen bien los que caen tan mal, y Moa no iba a ser una excepción. Alguien que con su mera presencia escrita puede poner de los nervios a tantos, me crea una empatía extraña, casi de admiración, lo reconozco. Soy tan así que me puedo hacer zapaterista cuando lo defenestren y lo arrastren por los suelos de Ferraz, y lo nieguen los suyos una y mil veces, que lo harán, si no empiezan a hacerlo ya. Cuando a Zapatero no le salude ni el portero de su casa, ese día me caerá bien.
ResponderEliminarDe todas formas, me parece que con la de jardines que pisa, has elegido el que más fácil defensa tiene, o descargo. Puestos a elegir, prefiero que se les llame delincuentes a los políticos, como hace Moa, que hijos de puta a una parte de los votantes, como hizo Maruja Torres. Manías, prioridades. Vigas y pajas, lo de siempre. Juliganismo hispano. Trincheras. Los nuestros. Ellos.
Luego tienes el caso del alcalde de los alcaldes, Pedro Castro, caso contrario por ser político que les llama tontos de los cojones, sin ánimo de difamar claro, sólo con afán descriptivo a los ciudadanos que votan al partido contrario al suyo. Urbanidad lo llaman en su caso, y ahí sigue por los madriles, dando lecciones de democracia... orgánica.
Lo que no me ha quedado claro es si prefieres que encarcelen a Moa como a los de Egunkaria o que liberen a los de Egunkaria como lo está Moa.
Saludos.
A CONTENEDOR A.:
ResponderEliminarLas dos últimas líneas de su comentario constituyen el mejor resumen de su argumentación, pues los encarcelados de Egunakaria lo fueron por nada y Moa no está encarcelado, ni procesado.
Y en lo tocante a Maruja Torres y Pedro Castro, le recomiendo que vuelva a leer con atención lo que escribió una y lo que dijo el segundo; y digo "con precisón" porque es sustancial el tiempo de los verbos y su significado literal, así como los calificativos y su nexo con el verbo, con los sustantivos y con los complementos.
Escribir y hablar no es tan fácil como algunos creen --leer y escuchar tampoco--, máxime si se quieren hacer afirmaciones, insinuaciones o subrayar presunciones, entre otras cosas; y además jurídicamente es fundamental dirimir si se trata de "señalamientos" genéricos o referidos a una o varias personas suficientemente identificadas.
Sea como fuere, para defender el supuesto "derecho" de Pío Moa --o de otros-- a hacer acusaciones concretas contra personas concretas no hace falta dar tantos rodeos. Usted considera que tiene "derecho" o que las difamaciones a las que recurre son política o éticamente disculpables, y yo opino que no.
Así de simple.
Saludos.
Lo dicho, vigas y pajas. No va más.
ResponderEliminarSaludos
A mí me asombra lo fácilmente que una parte de la derecha acepta y elogia a un antiguo miembro del GRAPO. Incluso dicen, indignados, "¡hasta cuándo se va a seguir recordando lo del GRAPO!". Pues siempre, claro. Porque no sé cómo se olvida eso. ¿Por qué Moa es diferente a otros "ex-terroristas"? ¿Sólo porque ahora les hace el juego?
ResponderEliminarContenedor amarillo, claro ejemplo de lo que escribes en el post, claro ejemplo de la España zapateril, de la democracia liberal de la derecha extrema. Mira por dónde a mí, contenedor amarillo ni me cae bien ni mal, me es indiferente, pura basura y la basura ha de reciclarse o seguir oliendo. Está claro que para ser contenedor a él o ella le gusta seguir oliendo. En cuanto a lo de Egunkaria le voy a dejar claro lo que pienso: Deben estar libres y Pío Moa encarcelado. Por varios motivos, porque además de defender a terroristas de Estado (dictadura), bajo editoriales de partidos políticos (no se le aplica la Ley de Partidos) es un ex-terrorista no arrepentido al defender el uso de la violencia en muchos casos. El derecho que asiste a Moa a vivir en democracia es el mismo que asiste a contenedor amarillo a contener cartón o vidrio.
ResponderEliminarDespués de pensarlo un rato, me quedaría más tranquilo si mi frase que usted reproduce la leyera de nuevo. Considero que no ha sido interpretada correctamente.
ResponderEliminarGracias.
¿Se publica la réplica o no? Por ahorrarme el escrito a Gloria.
ResponderEliminarGracias.
Yo reconzco que siempre he sido más de Onaindía. Me pillaba más cerca. Otro ex, incluso terrosrista. Una gran pérdida.
ResponderEliminarEl cripticismo de "n de Navarra" quiere trasladarlo al espacio para parecer culto o culta y es un patético/a "juliganista" de la España cañí, de la del solar patrio que no se resisten a compartir, de los dominios donde no se ponían el sol, de losdiscriminadores, asesinos y perseguidores de los que no defienden un territorio que creen tenerlo desde las cuevas de Altamira. La interpretación de los escritos se llama comprensión lectora y, afortunadamente, cada cual hace una lectura crítica según le parece. Interpretar una frase como el autor ha querido decirla es velocidad lectora, interpretarla conlleva otros procesos cognitivos que los contenedores amarillos desconocen. Más le valdría tener contenedores azules para tirar sus bodrios de escritos a la basura sin pasar por la Red.
ResponderEliminarGloria, una vez desahogada, que parece que lo necesitabas por la violencia de tus empellones ad hominem, esperaremos a las palabras y no a los exabruptos. Mientras tanto recordamos que los vidrios van al contenedor generalmente en forma de iglú, los envases en el amarillo, los cartones y el papel en el de color azul y los desechos orgánicos y demás desperdicios sin especificaciones especiales en el verde. Actualmente están intentando introducir en algunas ciudades el contenedor marrón, exclusivamente para desechos orgánicos, con el fin de fabricar compost. En estos nuevos contenedores se recomienda la utilización de bolsas biodegradables para facilitar la transformación.
ResponderEliminarSaludos.
¡Vaya, la derecha extrema tan cortés y respetuosa como siempre! Pues, no, no espere otro desahogo porque no lo necesito, introdúzcase de la cabeza a los pies en los contenedores marrones sin bolsa biodegradable pero antes imprima sus escritos y recíclelos en el azul.
ResponderEliminarA GLORIA Y CONTENEDOR A.,
ResponderEliminarSólo quiero subrayar un detalle que a mi criterio es sustancial: equiparar las difamaciones de Moa y la injusticia ¡¡¡probada y oficialmente reconocida!!! que se perpetró contra Egunkaria y sus administradores es, cuando menos, un intento de justificar un presunto delito de difamación apelando a un asunto totalmente ajeno y, por ende, hacerlo agitando filias y fobias ideológicas que también son ajenas al meollo del asunto que expuse, que tiene dos patas:
Primero, ¿es legítimo y legal que un ciudadano, Pío Moa, difame al Gobierno de España y lo acuse sin ambages de un delito del que no existen pruebas?
Y segundo, ¿es legítimo y legal que un medio de comunicación, Libertad Digital, difunda difamaciones contra la Administración?
Es evidente, que si en el "post" cito a Egunkaria es porque el tratamiento con el que la Fiscalía actuó contra los administradores del diario vasquista --¡¡¡que no colaboraba con terroristas!!!-- es manifiesta y vergonzosamente exagerada si se compara con el "derecho de pernada" que por pasividad lamisma Fiscalía otorga a Moa, cuyos insultos y difamaciones sobrepasan con creces toda racionalidad y apuntan que la Fiscalía tiene dos varas de medir.
Se quiera o no reconocer formalmente, los hechos informan que los defensores y propagandistas del franquismo y sus "aliados" merecen una singular comprensión... Por no decir que la Fiscalía --en este y en otros casos-- tiene "miedo", así lo apuntan sus comportamientos ante los "excesos" de Moa y otros "agitadores".
Ignoro a qué tiene "miedo" la Fiscalía y por qué consiente las difamaciones de la ultraderecha. Pero es así. A la postre, ser nacionalista español tiene "ventajas"; en tanto que ser nacionalista vasco, catalán o gallego es un factor que en ciertas instancias de la Administración es interpretado como un indicio o síntoma de comportamietnos ilegales.
No comparo Egunkaria y Moa, ¡¡¡para nada!!!; sino que he comparado y denunciado las dos varas de medir que aplica la Fiscalía. Esta es la esencia del "post", no otra.
Personalmente, lo que haga y diga el señor Moa no me interesa, pero sí me preocupa que la Fiscalía y la Justicia actúen con tan escasa profesionalidad y hagan segundas lecturas de los textos legales.
Gloria, como siempre, con su atrevida inmadurez, sus insultos y encasillamientos precipitados, y sus descalificaciones gratuitas y groseras. No sé como usted, Félix, no modera un poco más,llamando al orden, cuando toca y a quien toca, en bien del nivel de su propio blog y del respeto hacia quienes participamos en él de forma civilizada.
ResponderEliminarUn saludo.
Gloria, besos, que pases un buen día. Al fin. Espero.
ResponderEliminarSoy lateral, de siempre, y ambidiestro. Cosas de fútbol. Lo único que ya me interesa. No conozco la demarcación de derecho extremo. Lo más cercano son los extremos diestros o zurdos. Relájese mujer, que se le hincha la vena hasta dar miedo. Le va a dar algo.
D. Félix, pone los asuntos en dos planos diferentes. El proceso contra Egunkaria no se inició por alguna opinión vertida en sus páginas. Como parte de ese error, todo lo que expone no puede ser comparado.
Saludos.
Ahora que caigo, ¿está acusando a la fiscalía de prevaricación al afirmar que es por miedo por lo que no actua? Recuerde que eso es un delito.
ResponderEliminarCae usted en lo mismo que critica.
Nadie merece estar encarcelado por sus opiniones, difamatorias o no, porque corremos el riesgo de ser arrollados ualquiera por esa furia, como le ha pasado a usted en su réplica.
Saludos.
A CONTENEDOR A.,
ResponderEliminarSigue usted leyendo "a ciegas"...
Lea, por favor, y ponga atención en las palabras escritas con letras versales:
POR NO DECIR que la Fiscalía --en este y en otros casos-- tiene "miedo", ASÍ LO APUNTAN sus comportamientos ante los "excesos" de Moa y otros "agitadores"...
Eso dice, exactamente, mi comentario. No hay acusación de prevaricación, como usted deduce erróneamente por leer "a ciegas".
Saludos.
A ESCATO,
De momento --aunque al paso que ustedes van quizá llegue a haberlos--, no hay insultos ni difamaciones.
¿Descalificaciones? Sí las hay, naturalmente; como las que usted hace al emplear expresiones ccmo "atrevida inmadurez", "encasillamientos precipitados" o "gratuitas y groseras"; pero no constituyen una falta de respeto grave en el marco en el que se hacen, ni constituyen una amenaza a las personas, ni tampoco una difamación.
En todo caso, podría aconsejarles moderación, pero no es mi función.
Todos ustedes están "identificados" o "son localizables" y, al margen de discrepancias, no me he sentido insultado ni creo que haya motivos para ustedes se sientan insultados.
Le ruego (les ruego) que si debaten y acaban discutiendo y "levantando" la voz" (empleo de calificativos fuertes) no incurran en exigir luego formalismos que ustedes mismos han renunciado a practicar al subir el tono de voz.
Es decir, cuando el debate deviene discusión se dicen cosas poco elegantes, pero no estimo que haya insulto en ellas. Más claro: No vale subir el tono y luego exigir que se baje cuando conviene o interesa.
Todos se han empleado ccn dureza, todos, pero pese a algunos calificativos fuertes opino que han dado una lección: la de debatir-discutir sin insultarse abiertamente.
Lo que no entiendo es porque tratan de convencerse unos a otros sabiendo, ¡como saben!, que tienen sensibilidades, puntos de vita y acaso ideologías diferentes e incluso contrarias. Admitan que hay distancias y punto.
¿La verdad? Nadie posee la verdad.¿La razón? La razón es una capacidad (el raciocinio), no es un premio ni un bien inmutable.
A mi me parece elogiable que discutan, así conocemos otros razonamientos, argumentos, sensibilidades. Contenedor A. no me ha convencido, pero ha sido un placer conocer sus opiniones, su forma de entender las cosas.
Debatir-discutir es bueno, entre otras cosas porque aprendo (aprendemos) a admitir que mi ombligo no es el centro del mundo y si doy (damos) un paso más, aprendo (aprendemos) a convivir y admitir que fulano y zutano son raros como un "perro verde" pero tiene derecho a ser "perros verdes" --en tanto no usen la violencia ni "pisen" al vecino, sea del color que sea.
Un abrazo a todos/as.
Félix, pido perdón por mi inmadurez y grosería. Como hay más cosas que me interesan ,además del fútbol, debe ser que este curativo deporte y sanador de mentes no ha influido en mi educación. Por cierto, para interesarse sólo por el fútbol sabe poco, creo que hay tanto extremo derecha como extremo izquierda o, al menos, los había. Ahora son más centrocampistas atacantes o laterales adelantadosanto. En cuanto a los besos sólo los recibo de desconocidos que me estimulen y está claro que un beso de un contenedor no me estimula nada. Tendría que tener la boca muy grande y que me cupiera cualquier cosa y no es el caso.
ResponderEliminarEl día fantástico, como la mayoría de los días de mi vida. Excepto cuando paso cerca de asuntos escatológicos, apestan y debo taparme la nariz.
De acuerdo en algunas cosas. Pero...¿De verdad cree usted que se debe respetar a quien no respeta?
ResponderEliminarA mí me parece que nadie tiene derecho a decir o sugerir gratuitamente que otra persona o sus opiniones son basura, cuando esa persona ha sido correcta en sus formas y no ha insultado a nadie. Para mí, quien asi se expresa, por muy identificado que esté, no merece ser respetado. Opiniones, sí. Debate de ideas, por supuesto; pero las fobias compuslivas y los dogmatismos hay que domesticarlos para que no nos hagan traspasar determinadas líneas rojas. Se dice que la tolerancia es el arte de convivir con aquello que desprobamos, pero ello no supone que se deba aceptar ningún tipo de agesiones, aunque éstas sean sólo verbales. No se puede ser tolerante con el intolerante. Eso es lo que yo opino.
A ESCATO,
ResponderEliminarNo creo que lo dicho ene ste debate-discusión obligue al administrador de la bitácora a ejercer de censor. Usted extrae sus legítimas conclusiones y otros/as extraerán las suyas.
¿Expresiones criticables? Las ha habido, pero nada que sea insoportable ni extraordinario en la vida cotidiana.
Hace ya años que opté por no hacer montañas donde sólo hay colinas, algunas escarpadas, sin duda, pero colinas al cabo.
Saludos.
POR CIERTO, Todos los que contamos más de 50 años de vida fuimos educados en aberrantes y "guerreros" dogmatismos por la Iglesia Católica y por el Estado nacional-católico y la inmensa mayoría hemos sabido "sortear" la sangre física y la de las palabras. Ya no es hora ni hay necsidad de buscar motivos para enfrentamientos que a nada conducen por cuatro o cinco "subidas de tono"... Salvo que alimentar el enfrentamiento sea "eje" o sustancia.
ATENCIÓN, ESTE COMENTARIO HA SIDO REMITIDO AL E-BUZÓN DEL ADMINISTRADOR POR UNA PERSONA IDENTIFICADA.
ResponderEliminarHay un tipo de "argumentación" que me resulta especialmente enojosa. El de "y tú más". También se la conoce como técnica del espantapájaros y esto no es argumentar es evadir. Un ejemplo, desde mi punto de vista, es la discusión -por otra parte deliciosa- generada en uno de tus últimos posts sobre el supuesto derecho a la difamación que existe en España: para justificar que se tomen medidas contra Pío Moa sutilmente se introduce el tema Egunkaria. Como digo, un espantapájaros que desvía la argumentación hacia la resolución de un agravio y no, como debería de ser, hacia la solución de un caso en particular: Pío Moa es un difamador o no lo es, independientemente de lo que haya ocurrido con Egunkaria o con M. Santís....
Por cierto y para finalizar, el derecho "stricto sensu" de Egunkaria ha quedado convenientemente reestablecido por los tribunales españoles, por lo que, creo, el espantapájaros tampoco era el más adecuado.
Álvaro.
A ÁLVARO,
ResponderEliminarEl caso Egunkaria NO ha quedado "restablecido" porque los acusados en vano quedaron en la ruina y el perodiódico cerrado. Cuando se indemnicen los graves daños, sólo entonces, se podrá decir que la justicia ha "quedado reestablecida". Por cierto, en el "post" queda claro que Moa, a mi criterio, es un difamador.