El fulgurante crecimiento en unos pocos meses del soberanismo y el independentismo en el otrora "oasis catalán" no puede entenderse sin entender estas dos factores interrelacionados:
1. La crisis de la Monarquía de 1978 [heredada de la dictadura], y
2. La crisis del nacionalismo españolista tradicional.
Ambas crisis se han desarrollado de forma extraordinariamente rápida debido a la desintegración a (esta a cámara lenta) de una eurozona neciamente diseñada y a la pésima gestión del problema por los incompetentes burócratas de la Troika.
El independentismo catalán, y muy señaladamente el independentismo parvenu de CiU, parasita de ambas crisis.
1. La crisis de la Monarquía de 1978 [heredada de la dictadura], y
2. La crisis del nacionalismo españolista tradicional.
Ambas crisis se han desarrollado de forma extraordinariamente rápida debido a la desintegración a (esta a cámara lenta) de una eurozona neciamente diseñada y a la pésima gestión del problema por los incompetentes burócratas de la Troika.
El independentismo catalán, y muy señaladamente el independentismo parvenu de CiU, parasita de ambas crisis.
Quienes estén interesados en comprender mejor lo que está ocurriendo en Catalunya deberían escuchar menos las tertulias convencionales que organizan TVE y otros medios audiovisuales (en las que los circunloquios sin sustancia son norma) y leer, aparte de otros textos, este: "25-N: Por qué han sido tan importantes las elecciones catalanas", vía SIN PERMISO.
CON ANTERIORIDAD,
"Catalunya 25-N: Triunfa la derecha económica y se consolida el idependentismo".
CON ANTERIORIDAD,
"Catalunya 25-N: Triunfa la derecha económica y se consolida el idependentismo".
Menos mal que encuentro sosiego intelectual en tu blog Félix, porque a veces tengo la sensación de vivir a contracorriente o de ser un marciano fuera de contexto.¡Cuántas tonterías he leído y escuchado estos días a cuenta de las elecciones catalanas!¡Qué país!. Gracias por tus siempre ponderados juicios y por los enlaces que nos facilitas.
ResponderEliminar¿Sabes?, de un tiempo acá alimeto la convicción racional de que uno de los defectos que más perjudica el "desarrollo" intelectual y político de las Españas es la predisposición de numerosos ciudadanos a la vagancia mental. Pondré un ejemplo: tan generalizada es la vagancia mental que en la mayoría de las tertulias que organizan las cadenas de TV y emisoras de radio el rasgo más común de los intervinientes es decir cosas que sabe hasta el que asó la manteca, cosas que por tanto anulan todo interés por escucharles, pero ellos y ellas siguen diciendo simplezas y defendiendo posiciones, no aportaciones.
EliminarLa comodidad mental ya está a la altura de otros vicios seculares, como la envidia o el individualismo.