El pasado viernes, Amnistía Internacional (AI) envió a la Fiscalía federal suiza y a la de Ginebra un detallado informe jurídico sobre las responsabilidades penales en que habría incurrido el ex presidente norteamericano George Walker Bush por los torturas que, según demuestran la abundante información disponible, él aprobó y ordenó.
Horas después de sustanciarse la iniciativa legal de AI, se anunció la suspensión del viaje a Suiza que el ex presidente norteamericano había concertado para participar en un acto y a renglón seguido, los organizadores del evento puntualizaron --según ha informado el rotativo Tribune de Genève-- que fueron ellos quienes decidieron cancelar la visita debido a la “controversia” que ha generado la iniciativa de AI.
Además, los organizadores han insistido en negar que la suspensión del viaje obedeciera al temor de que las autoridades judiciales helvéticas se vieran obligadas a abrir diligencias y detener al denunciado, aunque sólo fuera para tomar declaración.
Horas después de sustanciarse la iniciativa legal de AI, se anunció la suspensión del viaje a Suiza que el ex presidente norteamericano había concertado para participar en un acto y a renglón seguido, los organizadores del evento puntualizaron --según ha informado el rotativo Tribune de Genève-- que fueron ellos quienes decidieron cancelar la visita debido a la “controversia” que ha generado la iniciativa de AI.
Además, los organizadores han insistido en negar que la suspensión del viaje obedeciera al temor de que las autoridades judiciales helvéticas se vieran obligadas a abrir diligencias y detener al denunciado, aunque sólo fuera para tomar declaración.
Ha sido una de esas ocasiones en que un no suena sí.
De que en Guantánamo se han conculcado derechos humanos fundamentales no cabe la menor duda. Ni tampoco hay duda de que es altamente improbable que un fiscal o un juez, sea suizo o de cualquier otro Estado, tenga gallardía jurídica suficiente para actuar en consecuencia ante la rigurosa y bien documentada iniciativa de AI. De modo que la mejor solución es evitar situaciones molestas...
En todo caso, si la denuncia de AI sirve para evitar que Bush viaje por el mundo repartiendo mentiras, ya se ha conseguido algo...
Bueno sería que otro tanto ocurriera con los otros tres miembros del cuarteto de las Azores (Aznar, Barroso, Blair y Bush) que impulsaron la ilegal y sangrienta invasión de Irak.
En todo caso, si la denuncia de AI sirve para evitar que Bush viaje por el mundo repartiendo mentiras, ya se ha conseguido algo...
Bueno sería que otro tanto ocurriera con los otros tres miembros del cuarteto de las Azores (Aznar, Barroso, Blair y Bush) que impulsaron la ilegal y sangrienta invasión de Irak.
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