A demasiados periodistas y demás asalariados de los medios les cuesta reconocer que hay periódicos, emisoras de radio y TV que están podridos, semipodridos o acusan graves condicionantes. Es más, hay trabajadores de medios que incluso se niegan a reconocer que la mentira y la manipulación forman parte intrínseca de quienes han convertido la información en negocio y sólo negocio.
Más grave todavía, hay salvadores de la profesión que imputan el 100 % de esa responsabilidad a las empresas, ¡como si todos los periodistas fueran honestos!
Sin embargo, desde una óptica estrictamente ciudadana --la civilidad está por encima de todo interés personal-- lo que más debería preocupar a los profesionales de la información es que haya colegas que se prestan a esas prácticas, las consientan o guarden servil silencio cuando se producen.
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A la izquierda la imagen retocada que publicó el
rotativo hondureño La prensa y a la derecha, la foto original. La escena fue captada durante una manifestación anti-golpista reprimida por las fuerzas de seguridad. En España también hay medios que han difundido la foto amañada |
Sin embargo, desde una óptica estrictamente ciudadana --la civilidad está por encima de todo interés personal-- lo que más debería preocupar a los profesionales de la información es que haya colegas que se prestan a esas prácticas, las consientan o guarden servil silencio cuando se producen.
Los que se dedican a dormir conciencias y a cultivar el corporativismo no sólo mienten, sino que por lo general están comprados o, alternativamente, están bien pagados o bien recompensados por las connivencias o por los servicios prestados.
Esas y no otras son las enseñanzas a las que se llega al comprobar ¡sin sombra de duda! que un medio ha manipulado la realidad y que lo ha hecho de forma premeditada.
Para que el rotativo hondureño La prensa modificara y publicara la foto que ilustra este post fue necesaria la colaboración de varias personas... ¡Y que otras callaran!
En estos casos y cuando los hechos están plenamente comprobados, todos los periodistas tienen (tenemos) la obligación de denunciar y difundir lo ocurrido.
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ENLACE de interés: "Cobertura mediática: de detención a golpe", en DIAGONAL; y "La desequilibrada cobertura mediática de Venezuela y Honduras", en EL PLURAL.
cada vez tenemos menos asideros a los que agarrarnos... apenas podemos creer en lo que vemos o leemos.
ResponderEliminarbicos,