El descaro de la cúpula del BBVA aconseja guardar las distancias con esa entidad

BBVA: «Hay que evitar a toda costa la dación en pago»

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El BBVA se ha colocado premeditada e interesadamente a favor de seguir exprimiendo a los ciudadanos. No bastaba con que su presidente, Francisco González, diera rienda suelta a su singular visión de la realidad al denunciar como algo injustificable que la deuda pública española equivalga al 63% del PIB (tasa inferior a la de Francia, Gran Bretaña, Italia y etcétera), sino que además ahora salta a la arena pública el consejero delegado del BBVA, Ángel Cano, que en la escuela de negocios de Esade ha dicho, exactamente, esto:

“Responder a presiones populistas está bien, pero hay que tener cuidado de no estropear un mercado hipotecario de referencia a escala mundial”, palabras que constituyen la respuesta política --no bancaria-- del BBVA al anuncio realizado ayer en el Congreso por el presidente de Gobierno sobre la próxima aprobación de medidas para proteger a los ciudadanos que debido a la crisis --¡que es de origen financiero, no productivo!--, al incremento de los tipos de interés y al alza del euríbor --instrumento este que controla la banca-- no pueden afrontar el pago de las cuotas para amortizar la hipoteca de la vivienda que adquirieron a precios desorbitados y que, por ende, fueron tasadas por empresas que por lo general también están al servicio de los bancos, son filiales o están participadas por ellos (por ejemplo, Cajamadrid es la mamá de Tasamadrid, que fue la firma que asesoró la compraventa de Fadesa a Martinsa...)
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¿Cano vive fuera de realidad?: No, lo que intenta es esconderla

La actitud del consejero delegado del BBVA --que pone el carro antes que los bueyes pues desconoce los detalles de la iniciativa gubernamental-- merece que los cuentacorrentistas de esa entidad emigren a otros establecimientos menos partidistas y cuyos directivos no se llenen la boca dando lecciones de no se sabe exactamente qué, confundiendo seguridad jurídica con el ventajismo.
Cano también dijo que «hay que evitar a toda costa» la dación en pago.

Puesto a hacer consideraciones económicas con intención descaradamente política, Ángel Cano ha llegado a decir que España es el país desarrollado que cuenta con ¡los menores precios y las mejores prácticas en el mercado hipotecario!, y para acicalar el verbo ha añadido que el mercado hipotecario español es «una referencia internacional». A fuerza decirlo se lo acabarán creyendo.

Indudablemente, la legislación hipotecaria decimonónica que sigue vigente en España y directivos de entidades como el BBVA constituyen una referencia internacional, pero por motivos bien distintos a los que esgrime la cúpula de esa entidad.
[El BBVA es mitad hijo de un banco estatal, el Argentaria, que fue levantado con fondos públicos y privatizado --adivine cuándo y por qué gobierno...-- para mayor gloria de personajes como Francisco González]

A la vista de lo que ha dicho Cano, tener una cuenta corriente o una hipoteca en el BBVA viene a ser algo así como pegarse un tiro económico en la sien.

Actitudes como las de Cano ayudan a entender que España siga gozando de la fama de ser un país en el que los listos sin escrúpulos pueden hacerse de oro y, por el contrario, quienes trabajan --sea asalariados, autónomos o empresarios-- están mal vistos y peor tratados.

Así la cosas, cabe intuir que un día de estos el BBVA se sumará públicamente al PP para exigir el adelanto de las elecciones legislativas e incluso pedirá el voto...
Declaraciones como las de Cano figuran entre las que más y mejor contribuyen a restar crediblidad internacional a las cuentas públicas del Estado español y, por tanto, perjudican a la economía general de los ciudadanos españoles.

CON ANTERIORIDAD:

Junio 2011, "El presidente del BBVA, entre los bancarios mejor pagados del mundo... ¡Viva España!",

Enero 2009, "El presidente del BBVA critica la avaricia de los altos ejecutivos...", y

Febrero 2007, "Emolumentos personales, ¡9,78 millones de euros!".