Cuando se generalizaron las movilizaciones sociales contra la reforma laboral y los recortes y más recortes del gasto social que está imponiendo el Gobierno de Rajoy, la cúpula del PP estuvo tentada de criminalizar las protestas. El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, llegó a decir que su partido promovería una reforma del código penal que ampliaría los supuestos del atentado a la autoridad.
Sin embargo, por motivos desconocidos [entre los que con toda probabilidad figuraba el hecho de que esa reforma colocaría al Estado español en el grupo de países "pseudo-democráticos"], la vuelta de tuerca no se ha sustanciado, de momento...
¡Pero el afán criminalizador del PP sigue vivo!, pues el partido de gobierno tramita una reforma que crea un delito: la difusión de expresiones, frases y redactados [SMS, tuits, textos en bitácoras, etcétera] que según la autoridad propicien la alteración del orden público.
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Riesgo, cajón sin fondo
Sin embargo, por motivos desconocidos [entre los que con toda probabilidad figuraba el hecho de que esa reforma colocaría al Estado español en el grupo de países "pseudo-democráticos"], la vuelta de tuerca no se ha sustanciado, de momento...
Viñeta capturada en LITORAL |
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Riesgo, cajón sin fondo
El argumento, aparte de jurídicamente perverso, es de hondo calado, pues supone castigar penalmente las expresiones verbales o escritas que en base a criterios subjetivos puedan ser consideradas generadoras de riesgos (¿?), con independencia de que a posteriori se produzca o no un hecho punible y, para colmo, al margen de que pueda o no ser probado el nexo entre la persona que lanzó el mensaje y el autor o autores del presunto delito.
El asunto es más delicado de lo que dan a entender los columnistas y comentaristas orgánicos, que apenas han dedicado cuatro palabras a una iniciativa legislativa cuya finalidad última es silenciar las protestas, sobre todo aquellas que no sean vehiculadas a través de organizaciones registradas y, por tanto, controladas.
Si finalmente sale adelante esa reforma, la capacidad social de respuesta ante los abusos del Poder estará más condicionada, pues los ciudadanos indignados y los que simplemente se manifiestan en apoyo de una protesta estarán expuestos a ser procesados y condenados a una pena de cárcel aunque el encuentro y protesta se celebre en un espacio público peatonal sin alterar el tráfico rodado ni el orden público [se puede dar el sinsentido de que el emisor del mensaje o invitación ni siquiera haya participado en la protesta y si esta concluye con desordenes, sea procesado].
El PP auspicia una aberración impropia de un Estado democrático de Derecho.
De ahí a criminalizar sentimientos y deseos que sean considerados políticamente incorrectos media un paso.
MÁS sobre este asunto, en ELDIARIO.ES.
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Virtualmente, sentimientos y deseos están criminalizados ya.
ResponderEliminarEl camino del PP hacia una dictadura apoyada en la coartada de las urnas ya no puede ignorarlo nadie mínimamente informado. Mera coartada, la de las urnas, ya que nadie les votó para estos atropellos y excesos, y cometen fraude democrático desde que comenzaron a gobernar.
ResponderEliminarNo es igual pero, ¿no recuerda esto a lo que hizo Hitler en 1933 antes de las elecciones?El decreto del incendio del Reichstag acabó con las libertades democráticas,entre ellas la libertad de expresión; el respeto a la propiedad privada; la libertad de prensa; la inviolabilidad del domicilio, de la correspondencia y de las conversaciones telefónicas; así como la libertad de reunión y de asociación. Un saludo Agcasmor
EliminarPerdone el retraso en la respuesta, pero sí, lo que usted apunta es cierto, son perfecta y objetivamente comparables (no iguales, pero el sentido de lo que hace el PP es una etapa camino del DOMINIO; poder y dominio no son conceptos equivalentes, se puede ostentar el poder pero no tener el dominio. El "PP-línea dura" aspira a dominar).
EliminarEl PP con el apoyo del PSOE, que para eso son los dos máximos exponentes de esta partitocracia, y ambos están involucrados en que este país no avances. El titulo puede llevar al engaño y llevar a pensar que la alternativa es el partido que da dos pasos a la izquierda en la oposición y tres ala derecha cuando gobierna. Por lo demás el contendido de este artículo está muy bien.
ResponderEliminarNo discuto que el PSOE ha apoyado iniciativas del PP, pues es rigurosamente cierto. Pero en el caso del proyecto de reforma al que me refiero en el texto no tengo noticia, ni siquiera indicios, de que el PSOE vaya a apoyar la penalización de llamamientos a la protesta y de expresiones que generen riesgo de desorden público.
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