El arresto de la viuda y de los cinco hijos de Augusto Pinochet, el militar golpista que arruinó la democracia chilena en 1973, llega tarde.
Cabe calificar la noticia de relativamente positiva, pues revela que la Justicia, aunque lenta, funciona y acabará colocando a un sátrapa en el lugar que le corresponde... Al menos en Chile.
Sin embargo, el encarcelamiento de los Pinochet-Hiriart, acusados de roba y evadir capitales, deja un regusto desagradable porque en cierta medida son protagonistas invitados, reos sustitutos del titular y, por tanto, da la sensación de que pagarán pecados económicos propios, pero también purgarán los crímenes de lesa humanidad del padre.
No obstante, sólo son cinco los protagonistas secundarios de esta secuela del caso Pinochet que conviene deslindar del asesino, pues el sexto --el tocayo de su padre, Augusto-- se ha hehco acreedor de la envenenada herencia del dictador porque desde siempre se dedicó personal y sistemáticamente al abuso, tanto es así que su padre, recién apeado de la presidencia pero todavía general en activo, llegó a amenazar con movilizar nuevamente al ejército para evitar que su vástago fuera procesado.
Las salvajadas de Pinochet han quedado impunes gracias, entre otros, al socialdemócrata Tony Blair y al católico José María Aznar.
El papel de estos dos políticos de la democrática Europa conviene recordarlo siempre. Pero no por venganza, ni siquiera por la animadversión que pueda suscitar su actuación cuando Pinochet fue detenido en Londres; conviene recordar lo que hicieron siempre que hay motivo en recuerdo y por respeto a los miles de muertos, heridos, encarcelados y arruinados por el régimen de Pinochet.
TEXTOS RELACIONADOS:
..
ACTUALIZACIÓN:
24 horas después de ser detenidos, el juez Carlos Cerda ha dejado en libertad provisional con cargos a todos los miembros de la familia de Pinochet-Hiriart. La medida ha sido aplicada a 22 de los 23 imputados; la excepción es Óscar Aitken, ex albacea del general golpista, que no ha comparecido ante el tribunal y ha sido declarado en rebeldía.
24 horas después de ser detenidos, el juez Carlos Cerda ha dejado en libertad provisional con cargos a todos los miembros de la familia de Pinochet-Hiriart. La medida ha sido aplicada a 22 de los 23 imputados; la excepción es Óscar Aitken, ex albacea del general golpista, que no ha comparecido ante el tribunal y ha sido declarado en rebeldía.
2ª ACTUALIZACIÓN:
Tres semanas después del dictamen del juez Carlos Cerda, la Corte de Apelaciones de Santiago ha desestimado su iniciativa y considera que lso acusados no han cometido un delito de malversación de caudales públicos: "Un tribunal chileno paraliza el procesamiento de los familares de Pinochet".
Totalmente de acuerdo... llega tarde
ResponderEliminarSí, llega tarde, es cierto.
ResponderEliminarPero yo esta mañana me he quedado muy a gusto con la detención de los "Augustos".
Pero, desde luego, llega tarde. La historia siempre llega varias décadas tarde a su propia historia.
Este tipo de desenlaces son los que hacen que dejemos de creer en la justicia...
ResponderEliminarSobre lo de Blair y Aznar, mejor me callo.
Llega tarde pero, por lo menos, pegan un buen susto a los protagonistas.
ResponderEliminar¿y aquí para cuando? porque aquí si que vamos con retraso.
ResponderEliminarUn saludo.