«El desplome del mercado laboral con 4,1 millones de parados no ha supuesto ningún impedimento para que en el segundo trimestre de 2009, los asalariados hicieran más de 11 millones de horas extraordinarias y arruinaran con ello la creación de decenas de miles de puestos de trabajo (...) La prestación de las horas extras es voluntaria, pero expertos en el funcionamiento del mercado laboral aseguran que su realización no depende exclusivamente de los trabajadores».
Es decir, al cierre de este año y según datos oficiales se habrán trabajado unos 44 millones de horas extras pese a que los parados posiblemente superen los 4,5 millones. ¡Sin contar las horas extras que no se declaran!, que todas las fuentes consultadas estiman que engordarían en más del 35% la cifra de las declaradas.
Redondeando: ¡60 millones de horas extras durante el año negro del empleo!
Redondeando: ¡60 millones de horas extras durante el año negro del empleo!
¿Y qué decir de las horas extras que se hacen en empresas que han aplicado un expediente de regulación de empleo (ERE)?, pues en numerosos casos los asalariados que han conservado el empleo se ven obligados a cubrir tareas que hacían los que ¿sobraban?...
¡Viva la desregulación del mercado laboral que exige la CEOE!
Por cierto, ¿dónde están Inspección de Trabajo? ¡País...!
INFORMACIÓN puntual, en La voz de Galicia.
INFORMACIÓN puntual, en La voz de Galicia.
CON ANTERIORIDAD:
"La hipocresía reina sin apenas oposición en la economía real",
"Las reflexiones sindicales no venden, pero los despidos siguen...",
"Los 150 millones de euros de la huelga del metal de Pontevedra",
"Presión empresarial + jefes encastillados = desastre" y
"Barómetro Social de España: más capital y menos salario".
"La hipocresía reina sin apenas oposición en la economía real",
"Las reflexiones sindicales no venden, pero los despidos siguen...",
"Los 150 millones de euros de la huelga del metal de Pontevedra",
"Presión empresarial + jefes encastillados = desastre" y
"Barómetro Social de España: más capital y menos salario".
Esto es una consecuencia indeseada, digo yo, pero inevitable de encarecer la contratación imponiendo un alto coste de despido. Dado que es muy caro despedir, no se contrata, y el trabajo se hace con horas extra.
ResponderEliminarPor supuesto, esto jamás lo dirá tu sindicalista preferido. Argumentará que es porque los empresarios son mumalos mumalos. Pero los empresarios se adaptan a la legislación que se les impone, simplemente.
Ahora, cuando los sindicatos se nieguen a reformar el sistema laboral, recuerden que en realidad están abogando porque no se contrate y se hagan horas extras a porrillo.
El despido sólo es caro cuando es improcedente.
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